Con un idéntico antecedente estrepitoso, Ramiro Blanco (18-4-3, 10 nocauts) y Robin Zamora (13-5, 6 nocauts) se enfrentarán el 15 de febrero en el gimnasio Nicarao. Vienen de sucumbir ambos en el extranjero, el primero por decisión unánime ante Andrés Gutiérrez y el segundo por nocaut contra Héctor García en República Dominicana, dejando escapar el título Fedelatin 126 libras de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
Es un combate atractivo pactado en 131 libras. Se trata de la gallardía y potencia que posee Robin, contra la técnica y elegancia de Blanco, un muchacho talentoso que no termina de explotar a como se debe en combates cumbres. A los dos se les ha presentado esta buena oportunidad para de alguna manera darle un pequeño impulso a sus carreras.
En el papel este pinta para ser un combate explosivo. Si bien es cierto Blanco es más boxeador, también es fajador, le gusta meterse a la zona de fuego y provocar intercambios de metralla.
¿QUIÉN FAVORITO?
Blanco subirá al ring con esa etiqueta. Los argumentos son sólidos: es un peleador más curtido, con muchísima experiencia internacional, ha enfrentado a rivales de nombres como el chino Can Xu- campeón mundial de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB)- y está mejor asentado en 130 libras.
Zamora debe ser consciente que tiene la obligación de triunfar contra pronósticos. Él ya ha estado en esa posición otras veces y logró romper vaticinios adversos, como cuando venció a José «El Danto» Pérez en el 2017. Posteriormente tuvo una gran exhibición ante Lesther Lara tras un mes entrenando en Panamá con Rigoberto Garibaldi, sin embargo, se desinfló ante Héctor García en noviembre del 2018. Cayó por nocaut ante un rival al que teóricamente debió vencer sin problemas.
MÁS COMBATES
En la pelea semiestelar, Ernesto Irías cruzará disparos con Daniel Mendoza en 111 libras. En tanto, el invicto Gabriel Escalante enfrentará a Yoshinory Blandón en 140 libras. También estarán en acción Jordan Escobar contra Juan Munguía, entre otros duelos.