Enlazados con el nuevo campeón del mundo en la división superpluma WBC, Oscar Valdez se mostró sumamente emocionado y esbozando una enorme sonrisa, abrazó el cinturón verde y oro que llegó a sus manos el día de ayer, el cual lo ratifica como el nuevo monarca de la división.
“Me siento profundamente emocionado y feliz, yo soñé con este cinturón desde que tenía 8 años y hoy está aquí en mis manos. Quisiera agradecer a tanta gente porque sin ellos no estaría aquí, a mi papá, mi familia, a mi querido Roy Herrera y Arturo Elias Ayub quienes me ayudaron a cristalizar el sueño de estar en los Juegos Olímpicos, a Eddy Reynoso quien ha sido mi mentor, mi amigo, a mi manejador Frank Espinoza, por supuesto al licenciado Mauricio Sulaimán, quien siempre me ha brindado todo sus apoyo y a mi querido Don José, un hombre que confió en mi desde que me conoció en 2012 y a quien le prometí que llegaría ser campeón del mundo”. -comentó-
Conmovido por todo lo que está pasando en este momento de su carrera, Oscar dedicó de manera muy especial este triunfo a su exentrenador el profesor Bonilla quien falleció recientemente y a quien recordó con un cariño genuino y profundo, pues sus enseñanzas lo llevaron a ser el boxeador que es actualmente.
Sobre cómo vivió el encuentro, Oscar fue enfático al decir que desde que se oficializó el combate supo sería una guerra, pues la calidad de Miguel le exigiría todo, por ello al lado de Eddy Reynoso trabajaron y trazaron una estrategia que rindió frutos. Comentó también que la guía de Eddy fue crucial pues cuando vio que había lastimado a Berchelt se iba a lanzar con todo, -como siempre lo hace-; sin embargo, Eddy y su papá le gritaban que se calmara y que siguiera con la estrategia y así lo hizo.
Aseguró que cuando noqueó a Miguel, no dimensionó que tan lastimado estaba su rival, su amigo y compañero, en ese momento, la felicidad lo invadió y solo pensaba en festejar; no obstante, cuando volteó y vio que Berchelt no reaccionaba se asustó y sintió mucha tristeza, pues en el ring podrán ser rivales, pero la amistad y la admiración siempre están ahí. En este punto, hizo una pausa y mandó un emotivo mensaje a Miguel, a quien considera su amigo y un boxeador de excelencia que asegura, estará de regreso muy pronto.
Oscar quien en todos los escenarios se visualizó ganando, confesó que las emociones siguen a flor de piel tanto que no ha podido dormir bien.
Cuestionado de cuáles son los planes próximos y si ve en ellos una revancha con Miguel, Valdez dejó en claro que no está interesado en volver a enfrentar al “Alacrán” ya que esa noche quedo en claro quién es el mejor de las 130 libras y sobre todo porque tiene que cumplir con los compromisos que conlleva el título.
Nostálgico, recordó que cuando era niño y habitaba en una casa de Nogales, él se dibujó en una pared con el cinturón WBC incluso escribió la leyenda “Oscar Valdez WBC World Champion”, este recuerdo lo llevó a confirmar y exhortar a todos los presentes a cumplir sus sueños, pues estos se cumplen siempre y cuando se trabaje con pasión y disciplina.
Finalmente agradeció a todos quien se han tomado el tiempo de felicitarlo y han estado en este camino al título mundial y aseguró que uno de sus deseos es seguir apoyando a su fundación que tiene como objetivo apoyar a boxeo amateur y claro, defender dos o tres veces su corona mundial.