box al dia - boxeo mundial

Joseph Díaz da catedra de boxeo al nica Freddy Fonseca

👤Haxel Rubén Murillo @haxelbuhosky🕔4.May 2019

No ocurrió un milagro en Las Vegas, danzando en la cuerda del triunfo el amplio favorito. El estadounidense Joseph «Jo-Jo» Díaz (29-1, 15 nocauts) borró del cuadrilátero al nicaragüense Freddy Fonseca (26-3-1, 17 nocauts), a quien noqueó en el séptimo asalto, en un duelo de una sola cara, en la que Díaz brindó una cátedra de boxeo con un recital de combinaciones desde que sonó la campana hasta el último round cuando el entrenador Marcos Caballero decidió tirar la toalla.

Fonseca ya había caído a la lona en el séptimo round, producto del golpeo abrumador de Díaz, quien finalizado el enfrentamiento dijo que se tomó la pelea como algo personal por las bravuconerías del nica en la previa de la pelea. El californiano sencillamente fue un huracán, se adueñó del centro del ring desde el primer asalto.

En esos primeros tres minutos quedó claro cuál sería la tónica de la pelea: Díaz disparando golpes y Fonseca soportando el castigo. La mano izquierda de «Jo-Jo» ejecutada en diferentes formas, jab, cruzado y upper dejó un claro precedente de lo que iba a pasar. La derecha también hizo muchísimo daño en el rostro de Fonseca. Eso sí, el nica evidenció una gran condición física, pues otro peleador con la cantidad de golpes de poder que aguantó Fonseca hubiese caído antes del cuarto asalto.

PRIMER ASALTO
Jo Jo Díaz ejerce un claro dominio utilizando la mano izquierda de múltiples formas, en forma de jab, cruzado y upper. La derecha del californiano también hizo mella en el rostro del pinolero que entró tímido, sin disparar la zurda, siendo demasiado necio con el jab de derecha.

SEGUNDO ASALTO
Continúa el dominio de Díaz a pesar de que Fonseca habrá que decirlo, arriesgó un poco más. Las diferencias técnicas en el ring son abismales, Díaz supera en velocidad, elegancia y combinaciones de golpes a Fonseca. El doble jab de derecha y el castigo al cuerpo entra de forma efectiva a la humanidad del nica.

En el tercer round, el hígado de Fonseca ya estaba arrugado como una pasa. Los ganchos de izquierda y derecha le quitaron condiciones al nica. La fragilidad defensiva de Freddy era evidente. Nunca se vio una estrategia clara en su boxeo, se metió a pelear en la zona corta facilitándole el festín a «Jo-Jo». Tampoco aprovechó su mayor alcance de brazos, no peleó a distancia, no tuvo movilidad de piernas, guardándose la mano izquierda.

En el cuarto y quinto round la soberanía de Díaz era demasiado evidente. Olía a nocaut. En el sexto llegó la caída de Fonseca, y un round después, su esquina en un acto de misericordia decidió tirar la toalla. Díaz estaba en un festival de combinaciones, tirando golpes arriba y abajo. No era necesario alargar más la agonía de un voluntarioso pero limitado Fonseca.