Rafael Espinoza desata locura en Las Vegas y va por su tercera defensa mundial este domingo
Isaac Guerra
Las Vegas, Nevada — Con una entrada digna de estrella, el campeón mundial peso Pluma de la OMB, Rafael “Divino” Espinoza, encendió los ánimos este jueves al arribar al icónico MGM Grand, donde fue recibido como lo que es: un ídolo en ascenso.
El invicto jalisciense (26-0, 22 KO’s), respaldado por Zanfer y Top Rank, fue ovacionado por fanáticos que se dieron cita desde temprano para verlo llegar. Fotos, autógrafos y una energía que solo el boxeo mexicano sabe generar, marcaron el arranque de una semana que huele a guerra en el ring.
Durante su entrenamiento público, Espinoza mostró parte de su arsenal: piernas ligeras, manos educadas y una confianza que lo distingue entre la nueva generación de campeones. Este domingo, enfrentará al estadounidense Edward “Kid” Vázquez (17-2, 4 KO’s) en la que será su tercera defensa mundial, y nadie en Las Vegas duda de que el mexicano llega en su mejor momento.
“Cada vez me siento mejor en el gimnasio, ese ha sido mi objetivo desde que me coroné campeón: evolucionar pelea tras pelea. Y este domingo lo van a ver sobre el ring”, afirmó Espinoza, sonriente pero enfocado.
Desde que se coronó en 2023, el “Divino” ha despachado a rivales de respeto como Sergio Chirino Sánchez y el olímpico cubano Robeisy Ramírez, ganándose un lugar entre los boxeadores más emocionantes del momento. Este domingo buscará consolidarse aún más en una velada de alto calibre.
La función se celebrará en el T-Mobile Arena y tendrá como pelea estelar un choque de titanes: el japonés Naoya Inoue, considerado el mejor libra por libra del planeta, pondrá en juego sus cuatro títulos mundiales Supergallo (AMB, CMB, FIB y OMB) frente al invicto texano Ramón Cárdenas, en una contienda que paralizará al mundo.
La transmisión correrá a cargo de ESPN Knockout para toda Latinoamérica, llevando la pasión del boxeo a millones de hogares que estarán pendientes del orgullo mexicano, Rafael “Divino” Espinoza, quien quiere seguir escribiendo su historia con letras de campeón.
