El Foro Oceania Show Center fue escenario de una noche electrizante, donde la joven promesa Emiliano “Macanas” Cuéllar de Querétaro y el talentoso Óscar “Chabelito” Hernández protagonizaron una trepidante pelea de exhibición que dejó a todos con el corazón acelerado y un grato sabor de boca. Organizada por la Promotora TM Boxing, de Eric Ibarra, esta velada fue transmitida en vivo por Canal 6 de Multimedios, llevando la acción directamente a los hogares de millones de aficionados.
El combate, pactado a tres rounds de tres minutos con uno de descanso, fue un despliegue de técnica, velocidad y determinación por parte de ambos pugilistas. Desde el primer campanazo, “Macanas” mostró su precisión quirúrgica, trabajando con combinaciones al cuerpo y al rostro de su rival, mientras que “Chabelito” respondió con una defensa sólida y contragolpes llenos de intención.
El segundo round fue especialmente vibrante. Ambos boxeadores intercambiaron golpes con una intensidad que hizo levantarse a la afición de sus asientos. Cuéllar, con su estilo agresivo pero técnico, presionó constantemente, mientras que Hernández, fiel a su apodo, mostró astucia y habilidad para encontrar espacios y conectar golpes certeros.
El tercer round, sin embargo, fue el que se robó los reflectores. En un momento álgido del combate, “Macanas” conectó un gancho que dobló al “Chabelito” Hernández, dejando en el aire la duda de si se trataba de un golpe bajo o un impacto legítimo. Esta situación obligó al experimentado réferi Laurentino Ramírez a detener momentáneamente el encuentro para evaluar el incidente. Tras una breve revisión y sin marcar falta, el combate continuó, devolviendo la emoción a la lona.
Aunque la exhibición no tuvo un ganador oficial, dejó un mensaje contundente: tanto “Macanas” como “Chabelito” están destinados a grandes cosas en el mundo del boxeo. La velada también destacó por la impecable organización de TM Boxing, reafirmando su compromiso con el desarrollo del talento joven y el espectáculo deportivo.
Una noche para el recuerdo, donde el futuro del boxeo mexicano brilló con fuerza, dejando claro que el relevo generacional está en marcha.