Isaac Guerra
Para David ‘El General’ Cuéllar, cada encuentro sobre el cuadrilátero se convierte en una auténtica epopeya. A medida que el tiempo avanza, su corazón se llena de regocijo y gratitud al comprender que su travesía no es solitaria.
Guiado por un mentor respetado, cuya experiencia es vasta, Cuéllar se beneficia de su sabiduría y paciencia, compartiendo con él un conocimiento inestimable.
Sin embargo, más allá de la instrucción, el constante apoyo y la atención incansable del mentor actúan como un bálsamo, disipando la soledad que a veces puede acompañar este arduo camino.
Cada sesión de entrenamiento levanta un pilar de bienestar en su vida. Ha experimentado una transformación profunda, tanto en su forma física como en su mente, y la sensación que lo embarga es, simplemente, maravillosa.
La responsabilidad que lleva no es vista como un fardo, sino como un honor. Al igual que ‘El Canelo’ es singular en su esencia, ‘El General’ también lo es. Sus habilidades y disciplina son las herramientas que lo distinguen.
Él recuerda con nitidez las palabras de ‘El Canelo’, quien en una ocasión le transmitió que la disciplina allana el camino hacia el éxito más seguro.
Siguiendo esta premisa, Cuéllar se compromete a mantenerse fiel a sí mismo y a estar a la altura de todas las expectativas.
Las semifinales no despiertan en él ningún sentimiento negativo; al contrario, las abraza con resolución.
Su habilidad en el boxeo florece de manera continua, gracias a la experta tutela de Don Chepo, de quien ha absorbido un cúmulo de sabiduría.
Está dispuesto a brindar lo mejor de sí, sin importar en qué escenario se encuentre.
Cada desafío se convierte en una oportunidad para destacar y ofrecer un espectáculo inolvidable a aquellos que lo apoyan.
En estos instantes, se toma un breve respiro en medio de su gira de medios, pero pronto regresará con una determinación renovada para continuar en esta emocionante batalla.
Porque desde lo más profundo de su ser, tiene la certeza de que ‘El General’ ha nacido para enfrentar estos desafíos y eso, exactamente, es lo que llevará a cabo con todo su ser.