Isaac Guerra
(Las ilustraciones en este artículo, son solamente algunas que forman parte del expediente de investigación de boxaldia y que se difunden por ser del dominio público)
Alberto Carlo Ramos Hernández es “Charly El Grande”, un personaje oscuro cuyo propósito de desatar el caos y la controversia en el mundo del boxeo profesional mexicano ha sido revelado. Hay evidencias que hacen presumir que, en complicidad con su esposa o a espaldas de ella, Denilsi Doñe, quien prestó su nombre para la creación del portal, registrado como el número 19741314, “Charly El Grande” ejecutó una serie de acciones provocadoras y difamatorias que sacudieron la industria boxistica profesional, particularmente en México.
Desde sus raíces en Tijuana y San Diego, “Charly El Grande” arrojó alegaciones desestabilizadoras en contra de figuras destacadas del pugilismo, causando una ola de conmoción y desconcierto, escondido siempre bajo el anónimato y sin ningún sustento probatorio. Pero así como surgió en escena, “Charly El Grande” desapareció en un misterio igual de profundo. Sus cuentas de Facebook fueron clausuradas y su plataforma en línea, www.elgeniodelboxeo.com, se evaporó en el vasto ciberespacio.
La persistente incertidumbre que dejó a su paso inspiró al equipo de investigación de boxaldia.com a emprender la misión de desentrañar la verdad detrás de este enigma contemporáneo y perturbador de grandes figuras del pugilsmo, desde boxeadores, mánager, entrenadores, promotores, funcionarios de ring, autoridades boxísticas, y hasta de organismos y entidades privadas con participación en el medio. Revelaciones sorprendentes surgieron durante esta búsqueda: la figura detrás de “Charly El Grande” estaba estrechamente ligada a Danilsi Doñe, una mujer cuya dirección de correo electrónico, [email protected], la vinculó con perfiles en redes sociales, específicamente en https://www.facebook.com/alberto75ramos y https://www.facebook.com/danilsi.done. Capturas de pantalla detalladas, obtenidas y documentadas por el equipo de trabajo de investigación, respaldan esta conexión esencial en el enigma de “Charly El Grande”.
Aún más asombroso fue descubrir la relación matrimonial entre Danilsi Doñe y Alberto Ramos, que se documentó con meticulosidad en plataformas digitales.
La trama se torna aún más compleja. Los expertos en sistemas de boxaldia.com utilizaron sus conocimientos y destrezas para recuperar información eliminada del sitio web www.elgeniodelboxeo.com. Mediante rastreo de direcciones IP, lograron rescatar datos que arrojaron luz sobre la identidad detrás de “Charly El Grande” y cómo las piezas encajaron en esta intrincada narrativa.
Los hechos son incuestionables: las pruebas recopiladas indican una conexión directa entre Danilsi Doñe, Alberto Ramos y el enigma de “Charly El Grande”. Las voces masculinas en los audios y la aparición de un hombre en un video de entrevista sugieren una innegable relación con Alberto Ramos. Sin embargo, la incertidumbre persiste: ¿está Ramos escribiendo los artículos difamatorios o su relación y evidencias con su esposa la hacen a esta estar involucrada en este enigma oscuro?
Mientras la red de intrigas y revelaciones se desenreda, el mundo del boxeo y más allá aguarda con anticipación la resolución completa detrás de “Charly El Grande”. Las respuestas podrían alterar la percepción de un personaje que emergió del anonimato para agitar el mundo digital del boxeo mexicano y dejar una marca negativa e indeleble en el tejido de la controversia. En última instancia, Alberto Carlo Ramos Hernández se desvela como el arquitecto detrás de la figura oscura y controversial que cambió la narrativa en el ring y más allá de ese escenario.
De Agente Provocador a Potencial Amenaza en el Medio Boxístico.
El intrigante personaje conocido como “Charly El Grande”, cuyo historial se tejió de alegaciones desestabilizadoras y controversiales, se revela ahora como potencialmente más peligroso. En su paso por el mundo del boxeo mexicano, sembró caos y desconcierto a través de difamaciones sin pruebas y provocaciones sin fundamento. Sin embargo, su alcance parece haberse extendido más allá, desplegando acciones que sugieren una peligrosa inclinación hacia la violación de la privacidad y la integridad de individuos.
Las revelaciones obtenidas por el equipo de investigación de boxaldia.com apuntan a que “Charly El Grande” no solo desempeñó un papel en el mundo digital del boxeo, sino que ahora se cierne sobre el medio como un editor de BoxRec, plataforma que esencialmente concentra datos personales y detalles de los pugilistas. Lo más inquietante es su acceso a información confidencial, como “Credenciales de Elector” y pasaportes de presuntas víctimas, que podría ser utilizada de manera malintencionada y con graves perjuicios a su identidad personal, por decir lo menos.
Esta nueva faceta del enigma contemporáneo revela un potencial para presuntamente cometer hechos con apariencia de delitos de difamación y violencia de género, además de la posibilidad de hacer un uso indebido de datos personales. La comunidad boxística y más allá de ella se encuentra en alerta ante la incertidumbre de cómo “Charly El Grande” podría encauzar esta información y afectar la integridad y reputación de potenciales víctimas.
La combinación de acciones provocadoras y una aparente predisposición para traspasar límites legales plantea una preocupante interrogante: ¿cómo enfrentar a un individuo cuya sed de caos y controversia ahora amenaza la privacidad y seguridad de aquellos pertenecientes al medio boxístico? La resolución completa detrás de “Charly El Grande” se convierte en una búsqueda aún más urgente, con la esperanza de detener sus probables acciones perjudiciales y salvaguardar la integridad de las personas afectadas por sus actos.
La Verdad Sale a la Luz: Presuntas Víctimas de “Charly El Grande” Confrontarán a Alberto Ramos.
La revelación de que Alberto Ramos, el editor de Boxrec, es la figura detrás del seudónimo “Charly El Grande”, ha arrojado luz sobre la verdadera identidad de quien lanzó una campaña de desprestigio que afectó a numerosos individuos y entes de la comunidad del boxeo. Entre aquellos que presuntamente sufrieron las difamaciones y acusaciones infundadas, destacan figuras destacadas en el mundo del pugilismo, como la boxeadora profesional Jacky Calvo, el licenciado Mauricio Sulaimán, Presidente del Consejo Mundial de Boxeo, y el Lic. Juan Carlos Pelayo, presidente de Fecombox.
No menos impactantes son los nombres de Diego ‘El Pelucho’ Morales, ex campeón del mundo, Érik Morales, figuras emblemáticas en el boxeo mexicano, y Éricka Contreras, delegada de Jalisco. Karla Alegría de Chiapas, ex delegada Fecombox, Mariana Caballero, promotora de Miura. Figuras clave en la industria como Conrado Guerrero de Zanfer, Alejandro y Guillermo Brito durante su era con Zanfer (el último aún pertenece), y el periodista Víctor Silva, también se vieron afectadas por la campaña de desprestigio sin pruebas ni fundamento, pero sobre todo, bajo el amparo de un rostro escondido en el anonimato.
El modus operandi de “Charly El Grande” no discriminó en su propagación de acusaciones sin fundamento y mensajes de odio. Incluso se extendió hacia los promotores boxisticos Monroy González y Ernesto Neri, a quienes según información allegada a este medio boxaldia.com presuntamente amenazó mientras ya ejercía su rol como editor de Boxrec, inclusive también bloqueó a Sergio González de la Comisión de Boxeo de Salamanca, Guanajuato para que no acudiera a sancionar a otros estados o municipios. De ser resuelto por una autoridad judicial competente, el daño moral causado por tales acciones sería objeto de una cuantiosa indemnización económica; sin embargo, eso dependerá del ánimo de actuar y proceder legal de los presuntos afectados.
Ahora, con la verdad finalmente expuesta, las posibles víctimas de estas difamaciones enfrentan una realidad que saca a la luz la identidad de quien estuvo detrás de la campaña de desprestigio en su contra. La comunidad del boxeo en México y más allá ha sido testigo de un giro de los acontecimientos que plantea preguntas sobre la integridad y la ética en el deporte.
La confrontación de la verdad es un paso necesario en la búsqueda de la justicia y la restauración de la confianza. Las posibles implicaciones emocionales y profesionales que en su caso resulten de esta campaña de desprestigio no deben ser minimizadas. A medida que las presuntas víctimas procesan esta revelación, la comunidad del boxeo se encuentra en un momento crucial de reflexión y de reafirmar su compromiso con los valores que sustentan el deporte.
La Incertidumbre de un Futuro en Boxrec para Alberto Ramos: Cuestionamientos sobre Confianza e Integridad.
La reciente revelación de que Alberto Ramos, editor de Boxrec, es la mente maestra -o más bien siniestra- detrás del seudónimo “Charly El Grande” ha suscitado un cuestionamiento crucial en la comunidad del boxeo: ¿permanecerá Ramos en su posición y puesto de la prestigiada empresa mundial de récord y resultados, manteniendo acceso a la información delicada que el portal maneja?
La relevancia de esta interrogante no puede subestimarse. Boxrec se erige como un pilar de información en el mundo del boxeo, solicitando identificaciones oficiales y datos personales para llevar a cabo su actividad. La incógnita radica en si la entidad aceptará que Ramos continúe en su rol, teniendo acceso a datos que podrían ser utilizados de manera inadecuada, dadas las acciones pasadas vinculadas al personaje oscuro y difamatorio de “Charly El Grande”. Figuras relevantes del medio boxistico estiman que los días de Alberto Ramos en la empresa de Boxrec están contados, pues señalan que al ser una empresa extranjera de gran prestigio mundial, tiene la firme convicción de mantenerse al margen de todo acto que gravite en la ilegalidad y que le puedan acarrear serios perjuicios monetarios en caso de ser demandada directamente bajo la figura de una responsabilidad solidaria por daño moral.
La cuestión de la confianza y la integridad se vuelve central en este escenario. Mientras el titular del sitio web podría afirmar que Ramos ya no trabaja con ellos, esta declaración puede generar dudas sobre su veracidad. La comunidad del boxeo ha sido testigo de cómo Ramos operó bajo una máscara virtual y, como resultado, la confianza en sus palabras podría ser un duro desafío.
Es crucial reconocer que la confianza debe ser recíproca. Si bien las comisiones municipales y estatales cuentan con la aprobación de la autoridad administrativa o gubernamental, la relación con el sitio web Boxrec también depende de la confianza mutua. La comunidad del boxeo, que se apoya en la honestidad y la integridad, necesita tener la seguridad de que quienes manejan información confidencial actúan de manera ética y responsable.
En última instancia, la incertidumbre sobre el futuro de Alberto Ramos en Boxrec subraya la importancia de la transparencia y la confianza en el ámbito del boxeo. La comunidad espera con ansias una respuesta clara por parte de la empresa Boxrec, y la manera en que se maneje esta situación tendrá un impacto significativo en la percepción de integridad que debe prevalecer en el deporte.
“LA HISTORIA CONTINUARÁ”…
