El peleador sudafricano Ludumo Lamati, de treinta y un años (21-1-1, 11 KO’s), viajó a Inglaterra el 27 de mayo para enfrentar al invicto Nick Ball(18-0, 11 KO’s), de veintiséis años, de Liverpool, quien defendía su cinturón plata de peso pluma por tercera vez.
Ludumo dio una pelea competitiva; sin embargo, se vio abrumado en el duodécimo y último round, cuando su esquina tiró la toalla. Caminó de regreso a la esquina, pero segundos después, colapsó. El personal médico y los paramédicos de la Junta Británica de Control de Boxeo inmediatamente administraron tratamiento que incluyó oxígeno y primeros auxilios eficaces.
Ludumo fue sacado del ring en camilla y llevado rápidamente en ambulancia a la Unidad de Cuidados Críticos del Hospital Royal Victoria. Todo esto se hizo dentro del periodo vital: “Hora Dorada”. Allí lo sometieron a una cirugía para extirpar un coágulo de sangre y lo colocaron en un coma inducido para detener la hinchazón.
Gracias a la actuación oportunidad, leal y eficaz del organismo regulador y de la empresa que presentó la función: “Queensberry Promotions”, Ludumo Lamati logró ganar la batalla más importante de su vida con gran corazón, valentía y resiliencia.
Esta historia nos deja con importantes experiencias sobre unión, fortaleza y empatía, pues cabe reconocer esfuerzos como los de Frank Warren y Queensberry ayudaron a facilitar el viaje de su madre y prometida para estar con Ludumo en los momentos más complicado, Así como también las acciones de Hugh O’Halloran de Belfast Boxers quien estableció una página Go Fund Me para apoyar a Ludumo.
El Consejo Mundial de Boxeo felicita y reconoce a todas aquellas personas que estuvieron involucradas en la atención a nuestro querido campeón Ludumo. Gracias a todos ustedes, Ludumo se encuentra ya en su país, recuperándose con el espíritu en lo más alto y listo para retomar su vida al lado de los seres que ama.


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