Este medio día en los tradicionales “Martes de Café” la familia del boxeo recibió tal como merece al campeón interino superwelter Sebastián Fundora, quien llegó acompañado de su papá y su hermana, pero también de su promotor Sampson Lewkowicz, quien no podía ocultar la felicidad de ver a Sebastián vestirse de los colores verde y oro.
Sebastián quien se coronó campeón interino WBC, el pasado 9 de abril venciendo por nocaut técnico en el noveno asalto a Erickson Lubin se mostró feliz de estar en México, pero sobre todo del gran y cálido recibimiento a él y su familia.
Para el presidente del WBC, licenciado Mauricio Sulaimán, Sebastián es un ejemplo de que los sueños se hacen realidad y que el trabajo y la perseverancia son la clave para llegar a cristalizar las metas, además, de elogiar a la familia Fundora pues son una familia unida y amorosa.
Tras ver un emotivo video de la trayectoria de nuestro campeón y obviamente de su gran noche, el presidente del WBC hizo la entrega oficial del cinturón verde y oro, pero no sólo eso sino también del brazalete de campeón, que fue pensado y diseñado para que el verde y oro acompañe siempre a nuestros guerreros de los encordados.
Visiblemente emocionado, Fundora fue enfático al decir que este es un sueño hecho realidad pues siempre, desde que se inició en el mundo de los guantes soñó con llegar a ser campeón del mundo del organismo más importante.
Agradeció a todos quienes lo han acompañando en este camino, pero en especial a su promotor y amigo Sampson pues siempre creyó en él y sobre todo en su casta de campeón.
En este punto y feliz de estar nuevamente en su casa, -el WBC- Sampson recordó cómo conoció a Sebastián y expresó que el verlo
ahora coronado con monarca superwelter es su gran satisfacción, con las emociones a flor de piel, el promotor uruguayo recordó a su querido mentor José Sulaimán a quien siempre agradecerá su amistad pero sobre todo el compartir su pasión por el boxeo y por ayudar a todos esos jóvenes a seguir sus sueños sin importar lo difícil wig pueda resultar el camino.
Vestido con los colores verde y oro y con una sonrisa franca, el monarca abandonó el presidium para convivir con los chicos de Specyal Olímpics quienes se dieron cita en este Martes de Café para conocer a Sebastián y poder tomarse la foto del recuerdo.
