El entrenador y ex boxeador profesional Ramón Euroza, asentó que sus alumnos llegaran muy bien preparados para lo que serán sus respectivos combates a efectuarse el día 31 del presente, en el respaldo de la velada boxística que encabezan Eduardo Rizo y Jerson Aguilar, por el vacante cetro NABF Jr, de peso ligero.
Los boxeadores que tiene bajo su tutela son, el prometedor Adrián “Gallero” Pacheco, Moisés Sixto y Johanna Luokkanen, “vamos por una noche perfecta. Ojalá ganen los tres, y vamos con esa confianza”, precisó Euroza en el gimnasio de su propiedad en la colonia Nápoles.
Adrián Pacheco se rifará el físico en el duelo semifinal de la noche cuando enfrente a Isaac Castán, en superpluma a ocho rounds; Moisés Sixto tratará de repetir otro nocaut, y su rival será Alán Sarmiento, en peso supergallo, y Luokkanen intercambiará metralla con Karla Carmona, en peso de 48.500 kilogramos.
“Los tres han entrenado fuerte en el gimnasio. En la otra función que hizo Decisisión Dividida en el Salón Villa Flamingos, Moisés y el ´Gallero´ ganaron por nocaut. Los dos tienen hambre de triunfo y espero que repitan triunfos. De Johanna espero que dé una buena pelea ante Carmona, creo que será una pelea pareja”, explicó Ramón.
En su época como pugilista profesional, Ramón Euroza conquistó el título nacional de peso minimosca y Continental de las Américas del WBC, y comentó que siempre trata de inculcarles a sus pupilos la disciplina y aprendizaje.
“Siempre trabajamos a diario con los muchachos. Ellos han sabido que siempre a cada compromiso deben de llegar en grandes condiciones físicas. Trato de imprimirles un buen estilo. Que en el día del peso lleguen bien, al hablar de bien, no solo es dar el peso y ya, que mis boxeadores no lleguen desgastados y que en el día de la pelea tengan todas las energías para ofrecer una gran pelea”, remató.
PIE DE FOTO: Ramón Euroza, junto con sus alumnos Moisés Sixto, Adrián Pacheco y el gran ex campeón mundial Humberto «Chiquita» González.
EL DATO: En su época como boxeador profesional, Ramón Euroza fue dirigido en su esquina por uno de los mejores mánagers en la historia del boxeo mexicano, Arturo «Cuyo» Hernández, y ganó el cinto nacional y Continental de peso minimosca.