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Chávez y De La Hoya se verán las caras en la Arena Monterrey

Isaac Guerra

Fue un 7 de junio del año 1996 cuando en Las Vegas Nevada, Julio César Chávez, el máximo ídolo mexicano de todos los tiempos, salía a combatir contra Oscar de la Hoya.

Ese día, De la Hoya ganó por nocaut técnico en 4 rounds, ese día su carrera quedó marcada de por vida porque el pueblo mexicano nunca le perdonó la afrenta, porque ese día no le ganó a un peleador, le pegó a todo un pueblo al que por muchos intentos quiso echarse a la bolsa y hasta la fecha sigue siendo su estigma.

De la Hoya estará hoy en Monterrey con motivo de la pelea de Jaime Munguía el sábado próximo, y ahí en el mismo lugar, la Arena Monterrey se encontrará con Julio César Chávez, que sigue siendo el máximo ídolo mexicano de todos los tiempos, al que sin duda alguna se le entregará la afición.

La duda es si la afición le responderá igual a Oscar de la Hoya o le reprochará el que le haya ganado no solamente una ocasión sino en dos ocasiones y eso la afición azteca no lo olvida y menos si nos damos tiempo para leer las citas textuales de una entrevista con el campeón que le realizó en el 2016 el periodista Salvador Rodríguez de ESPN.

«Era una pelea muy atractiva, el joven con el viejo, y el de la experiencia era yo. Me preparé como nunca para esa pelea, lógicamente yo ya traía mis problemas de adicción, pero aún así pude parar por dos meses y me preparé como nunca, hice un sacrificio inhumano porque estaba prendido yo a mi adicción, pero sabía que era una pelea muy importante, iba sumamente bien preparado.

«Pero faltando cinco días para la pelea, era mi último día de sparring, y ya era el último round de sparring y cuando menos pensé me pegan un golpe y que me cortan. Le dije a mi doctor que cómo le íbamos a hacer. Me dijo que la pelea se iba a suspender.

«Me convencieron y ese mismo día el doctor me operó, me cosió y dije, así me la voy a aventar ch… a su m.., el doctor me dijo que obviamente en la pelea se me iba a abrir, pero que iba a ir a Tijuana por un ungüento para cauterizar las heridas, para que la hemorragia no fuera tan profunda. No quise suspender la pelea, pero dije que sí se van a dar cuenta en la Comisión, la pelea se va a suspender. Pero la verdad es que se hicieron pend… en la Comisión, y así subí cortado», dijo Chávez.

ESTABA RECIÉN OPERADO

«Antes de la pelea me tuvieron que meter una aguja en la cortada para que no me doliera, porque yo estaba recién operado, me entiendes, la herida estaba abierta, y me mete la aguja el doctor para que no me doliera y se me viene la hemorragia otra vez. Una hora antes de la pelea, antes de subir al ring. Esperamos a que el comisionado se distrajera, me metieron la aguja, se me viene la hemorragia y ahí vamos corriendo para el baño para que el de la comisión no me viera”.

El corte se lo hizo su hijo Cristian cuando le dio un cabezazo accidental.

“Era Cristian, mi hijo más chico, para que no se dieran cuenta tenía la acetona y los vellos pegados, pero me pegó en la ceja y se me vino la hemorragia, yo salí corriendo».

«Cuando iba al ring ya iba sangrando. Dios me castigó y pasó lo que tenía que pasar. De la Hoya hizo su pelea, él ya sabía porque lógicamente ahí la cortada fue en el gimnasio de Bob Arum y tenían cámaras. Ahora sí me arrepiento, De la Hoya en ese momento no me hubiera ganado, mis respetos para De la Hoya, yo era mejor peleador que él, estaba todavía entero ahí, y había hecho una gran preparación, pero con la cortada cómo, era lógico que me ganara». Hoy ambos tienen caminos opuestos y están retirados, Julio César Chávez es analista de boxeo en TV Azteca y la afición lo sigue teniendo vigente cada sábado y lo sigue queriendo, mientras Oscar de la Hoya es promotor de boxeo, dueño de Golden Boy Promotions reconocido en Estados Unidos, pero no cumplió su sueño de ser ídolo mexicano, pues el estigma de haber derrotado al máximo ídolo mexicano lo sigue persiguiendo y el sábado que se vuelvan a ver en la Arena Monterrey seguramente la afición se lo hará saber.